Es hora de descubrir otra Praga más relajada y muy auténtica. Luego de Vinohrady, llega el turno de Karlín.

La oscura zona industrial ubicada en las afueras del casco antiguo de Praga se convirtió en los últimos años en un barrio vanguardista, meca de los fashionistas praguenses, donde se multiplican las propuestas que colman las expectativas de cualquier hipster que se precie, con una interesante oferta gastronómica y su activa vida nocturna.

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Esta vez la línea amarilla del metro nos trasporta a la estación Invalidovna, donde comenzará nuestro recorrido por el barrio de Karlín, en Praga 8. Para ponernos en tema, atravesamos Futurama Business Park, un agradable conjunto de edificios de ladrillo a la vista –con espejos de agua y esculturas que amenizan–, donde aspira a trabajar el millennial promedio. Luego atravesamos el parque que le da nombre a la estación de metro donde nos bajamos, donde está un gran edificio barroco que aún espera ser restaurado y que muy probablemente pronto se convierta en otro polo de atracción del barrio.

La plaza Lyčkovo (Lyčkovo náměstí), una cuadra más adelante, con flores y bancas que invitan al descanso, está presidida por una espectacular escuela primaria construida en estilo art nouveau.

Pronto empiezan a aparecer las cafeterías, bares y restaurantes que pusieron de moda el barrio y que hacen las delicias de hipsters y fashionistas. La casa de té Tea Mountain, el bistró Proti Proudu (puedes leer una entrevista con los dueños acá), el café Můj šálek kávy, el café Kavárna Kočičí, para los fanáticos de los gatos, el restaurante y panadería Eska que es, hoy por hoy, el lugar más de moda del barrio, ubicado frente al Foro Karlín.

Luego de una deliciosa comida en Eska, que combinaba las antiguas recetas con toques modernos, con el foco en la sustentabilidad (muy en línea con el espíritu local), continuamos hacia la plaza Karlínské (Karlínské náměstí), corazón del barrio, donde se encuentra la Iglesia de San Cirilo y San Metodio (kostel svatých Cyrila a Metoděje), una de las más grandes de Praga.

El secreto: Debo conceder que no descubrí estos lugares sola, sino que me acompañó mi amiga Jitka Jirátová, una de las personas que más saben sobre Praga, es guía ¡y habla perfecto español!

Para nuestra siguiente parada, ponemos rumbo al río Moldava, para encontrarnos con Main Point Karlín, un edificio que ha ganado premios internacionales de arquitectura por su diseño ecológico y que alberga la galería Kooperativy. Y por último, un poco más adelante, se encuentra el interesante conjunto arquitectónico llamado River City, formado por los edificios Danubio, Nilo y Amazonas.

El recorrido termina cuando nos dirigimos al túnel que con un gran cartel que dice neboj («no tengas miedo») te invita a pasar de Karlín a Žižkov, por debajo del monte Vítkov, donde está el Monumento Nacional y la estatua ecuestre de Jan Žižka.

 

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Escrito por:Jes Garbarino

Periodista y viajera. Armo la maleta (antes era mochila) cada vez que tengo oportunidad, desde hace más de 20 años.

3 comentarios en “PRAGA para iniciados: Karlín, donde el espíritu industrial se puso de moda

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