Todos en Ámsterdam van y vienen de su negocio montados en un par de ruedas, lo cual, tanto para el peatón como para el automovilista resulta una pesadilla. Y todos ellos son consumados ciclistas, chiquillos de cuatro años llevan en el cuadro a otros de tres. Las madres pedalean alegremente con lactantes de un mes…
Leer Más